sábado, 6 de noviembre de 2010

Modernidad

Mi abuela cantaba bajito, decia que no tenia voz, arrastraba  declamando las palabras.
Durante el verano nos ponia la radio por la tarde y escuchabamos copla, entonces para nosotros sus nietos era como una sesión de tortura, señoras y señores con voz empastada cantanto penas y sufriendo.
 En la emisora que escuchabamos repetian continuamente las mismas, asi descubri que ella se emocionaba cuando sonaba una, era sorprenderte observar como sus ragos se dulcificaban. Ella una mujer fuerte que crio a sus hijos y mal educo a sus nietos cuando escuchaba esa canción su ojos se tornaban opacos. Que esconderia el pozo de sus recuerdos.  La versión que yo escuchaba era de Concha Piquer la que aqui dejo es de  de Concha Buika...

1 comentario:

Anónimo dijo...

pós impressionante. Realmente gostei de ler seus posts.